Físico cuántico armoniza las leyes naturales con el libre albedrío
¿Somos libres en nuestras
decisiones? O bien, ¿la libertad es sólo una gran ilusión, y en última
instancia, nuestras acciones están predeterminadas por las leyes
naturales? El físico cuántico Hans Briegel ha desarrollado por vez
primera, un modelo teórico que reconcilia nuestra comprensión de las
leyes de la naturaleza con la idea de libertad. Según se informa en la
revista científica Nature.
“Como científico deseo entender la posibilidad y el origen de la
libertad con más detalle”, señalaba el profesor Hans Briegel, del
Instituto de Óptica e Información Cuántica (IQOQI) y la Universidad de
Innsbruck, algo que lo vuelve en contra de la tendencia actual en la
investigación del cerebro, ya que el libre albedrío se interpreta como
una ficción, y por lo tanto niega la libertad humana. En los últimos
años las neurociencias han entregado en repetidas ocasiones evidencias
experimentales que apoyan esta hipótesis. Algunos expertos incluso,
quieren refutar la competencia de la adaptación con los nuevos
hallazgos.
El físico teórico, Hans Briegel, presenta ahora una teoría que
armoniza la idea de la libertad con la existencia de leyes universales
de la naturaleza: “Cada objeto, sea humano o máquina, forma parte de la
naturaleza y está sujeto a sus leyes en todos los niveles”, aclara.
“Ahora bien, esto plantea una pregunta: ¿Cómo puede darse la libertad,
si en última instancia, todo está gobernado por las leyes naturales”.
Hans Briegel demuestra con su trabajo publicado en Nature Publishing
Group, que los agentes naturales o artificiales con un cierto grado de
organización física o biológica, sí pueden desarrollar una voluntad
libre.
La memoria también mira al futuro
Lo que ha hecho Hans Briegel es presentar una nueva teoría de
procesamiento de la información, donde las acciones son un agente en
estrecha interacción con la memoria. El modelo subyacente de memoria, ya
sea la memoria artificial de una máquina o la ubicada en el cerebro de
un ser vivo, almacena fragmentos de modo que resulte fácil recuperar la
experiencia. “Para entender la posibilidad de libertad, hay que decir
adiós a la idea del cerebro como una computadora e ir al diseño de un
modelo dinámico estocástico de
la memoria de procesamiento de la información”, explica Briegel. Junto
con la estudiante de doctorado Gemma De las Cuevas, Briegel ofrece un
modelo de memoria episódica y desarrollo compositivo. Según su
experiencia, muchos fragmentos individuales (clips) se almacenan
interconectados mutuamente en una red. Cualquier movimiento al azar en
la memoria recupera determinados recuerdos relacionados con los clips.
Este viaje a través de los recuerdos está determinado por las
probabilidades de transición que pueden ser modificadas sobre la base de
la experiencia.
El centro de memoria episódica y de composición facilita la
posibilidad de utilizar los clips existentes, de nuevo al azar,
intercambiándose a sí mismos para generar nuevos clips que,
posiblemente, sean una ficción de la experiencia. El agente (las
acciones), por tanto, es como una plataforma de simulación para un
acercamiento recreativo a las impresiones del medio ambiente y puede
basarse en anteriores experiencias y posibles escenarios futuros, y
actuar sobre ellos. “Se preservan estas acciones a sí mismas en las
actividades que desencadenan los nuevos clips, y luego son integradas en
la memoria y tratadas en el futuro como experiencias reales. De esta
manera la ficción influye en las acciones reales debido a los agentes”,
explica Briegel.
Conducidos por el azar
El azar juega un papel fundamental en este concepto, tanto en
términos de movimiento a través de los recuerdos como en la modificación
de los clips existentes. “En la física cuántica sabemos que los
procesos del azar, los llamados saltos cuánticos, no sólo tienen lugar a
nivel molecular, sino que ahora se utilizan de forma rutinaria en el
laboratorio”, añade Briegel. “En nuestro modelo, el azar es una fuerza
motriz, tanto en el área de la memoria como en la mutación y producción
de nuevos clips. El azar es una parte constitutiva del procesamiento de
la información del agente y, en cierta medida una parte de su
identidad”.
Simulación proyectiva
Hans Briegel lo llama modelo estocástico de procesamiento de la
información de simulación descriptiva. No se trata de hacer ninguna
explicación de la conciencia o de una teoría sobre cómo funciona el
cerebro. “Lo que esto demuestra, más bien, es que los sistemas están
sujetos a todos los niveles por las leyes de la física; sin embargo, hay
como una sala de juegos que puede ser explotada”. Y esto se aplica
tanto a los sistemas biológicos como a las máquinas.
“La existencia de tal libertad de acción es un requisito previo para
la posibilidad de libertad, y en última instancia, de una libre
voluntad”. Briegel hizo hincapié en que las leyes de la física y el
libre albedrío no son en absoluto incompatibles. “Incluso si la libertad
humana resulta ser al final una ilusión, la gente, en principio,
seguiría teniendo la posibilidad de ser un robot libre”, bromeó Briegel.
Es posible que este modelo pueda ser aplicado incluso con las
tecnologías existentes hoy en día.
Hans Briegel es profesor en el Instituto de Física Teórica en la
Universidad de Innsbruck, y director científico del Instituto de Óptica e
Información Cuántica (IQOQI) de la Academia Austríaca de Ciencias.
Cuenta con el apoyo financiero del Fondo Científico de Austria (FMF).
- Diario de Referencia: Briegel, H.J. On creative machines and the physical origins of freedom. Sci. Rep. 2, 522 (2012) DOI:10.1038/srep00522 .
- Título original: Natur lässt freien Willen zu – Quantenphysiker auf der Suche nach den Ursprüngen der Freiheit .
- Título original: Natur lässt freien Willen zu – Quantenphysiker auf der Suche nach den Ursprüngen der Freiheit .
http://bitnavegante.blogspot.com.es/2012/07/fisico-cuantico-armoniza-las-leyes.html?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed:+bitnavegante+(BitNavegantes)&utm_term=Google+Reader
Comentarios
Publicar un comentario