¿Por qué la vida es tan difícil? Cómo puedes hacerla mucho más agradable
Que
la vida es difícil es una sensación que muchos tenemos, ¿verdad?
Tenemos la sensación de que a menudo las cosas se complican demasiado.
Nos encontramos con las dificultades de la vida y pensamos: ¿Por qué tanto? Entiendo que a veces las cosas sean difíciles, ¿pero es necesario que lo sean tanto? ¿Es necesario que se ponga todo tan cuesta arriba?
Esta es una sensación que nos causa mucha frustración y malestar.
Y hoy explicaremos por qué se produce y cómo lo podemos resolver.
O bien pensamos que no somos lo suficientemente buenos para tener una vida mejor, o bien que en nuestro entorno hay circunstancias hostiles que nos lo impiden.
Cada persona es distinta y piensa cosas distintas, pero de una manera u otra, la mayoría de nosotros asociamos el origen de nuestro dolor a algún tipo de causa “mala”.
Pero no es así en absoluto.
De hecho, es todo lo contrario.
El origen de todo nuestro sufrimiento es el amor. Tú eres un ser de amor puro e ilimitado, y esta es la causa de todo lo que te hace sufrir.
Parece una contradicción, ¿verdad? Pero resulta que es así.
La causa profunda del dolor es el amor.
No eres un 90% de amor, ni un 99%, ni un 99,99% de amor. Eres puro amor al 100%.
Lo que pasa es que, en tu día a día, en función de lo que piensas y lo que haces, solo una parte de este amor sale y se manifiesta.
Cuando tienes pensamientos totalmente positivos y amorosos, toda tu luz sale al exterior y se expresa en toda su magnitud. Este es tu estado natural. Es el estado que resuena con lo que realmente eres.
En cambio, cuando tienes pensamientos negativos hacia algo, una parte de tu luz se bloquea y no sale. Siempre que tienes un pensamiento que no es del todo positivo, una parte de tu amor se queda encerrado y no puede salir.
Te lo puedes imaginar como unas compuertas a través de las cuales pasa un rio de amor. Cuando las compuertas están del todo abiertas, el rio puede fluir con total libertad. Cuando se cierran, el rio se estanca.
Y tus pensamientos son los que abren o cierran las compuertas.
El primero es que siempre que nuestro amor se bloquea, nos sentimos mal. Siempre. No hay excepciones en este punto. El amor puro e ilimitado es nuestra verdadera esencia, y siempre que se bloquea sentimos como si nos faltara un trozo de nosotros.
Y el segundo factor es que este malestar se produce siempre al más mínimo bloqueo. Solo que tengamos el más mínimo pensamiento negativo, ya habrá una parte de nuestro amor que se bloqueará y nos sentiremos mal.
Es posible que alguna vez hayas pensado: soy consciente de que aún no me comporto de forma 100% amorosa. A veces critico a los demás, a veces pienso mal de ellos, a veces me critico a mi mismo… Pero tampoco debería pasar nada. Debería haber un poco de margen. Me parece desmesurado que mi vida se tuerza tanto solo por unos cuantos pensamientos negativos de vez en cuando…
Pues no. No hay ni un milímetro de margen.
Y no es desmesurado en absoluto.
Tú eres 100% amor, y siempre que tienes un pensamiento negativo, por pequeño que sea, estás yendo en contra de lo que realmente eres. No puede haber margen en este punto.
Tu alma no aceptará nunca nada que no sea amor incondicional hacia todo y hacia todos.
Siempre.
Así que si quieres vivir una vida plena y armoniosa, solo hay un camino posible: tener siempre pensamientos amorosos y respetuosos hacia todo.
No puede haber nunca en tu mente un pensamiento de rechazo hacia nada.
Según como se mire, puede parecer un objetivo imposible de alcanzar. Estamos demasiado acostumbrados a pensar negativamente sobre muchas cosas. Incluso hemos llegado a creer que en muchos casos está plenamente justificado hacerlo: tal persona se merece que piensen mal de ella, tal situación se merece ser rechazada…
Y es cierto que hay circunstancias y conductas que debemos mejorar.
Pero no desde el rechazo.
El rechazo no es el verdadero camino de nuestra alma. Nuestro verdadero camino es el amor.
Y siempre hay maneras de enfocarlo todo desde el amor.
Un gran abrazo,
Jan Anguita
https://www.jananguita.es
Nos encontramos con las dificultades de la vida y pensamos: ¿Por qué tanto? Entiendo que a veces las cosas sean difíciles, ¿pero es necesario que lo sean tanto? ¿Es necesario que se ponga todo tan cuesta arriba?
Esta es una sensación que nos causa mucha frustración y malestar.
Y hoy explicaremos por qué se produce y cómo lo podemos resolver.
La Razón Última de Todo Tu Dolor
Cuando pensamos en por qué la vida es tan dura, muchas veces llegamos a la conclusión de que hay algo “malo” en algún lugar.O bien pensamos que no somos lo suficientemente buenos para tener una vida mejor, o bien que en nuestro entorno hay circunstancias hostiles que nos lo impiden.
Cada persona es distinta y piensa cosas distintas, pero de una manera u otra, la mayoría de nosotros asociamos el origen de nuestro dolor a algún tipo de causa “mala”.
Pero no es así en absoluto.
De hecho, es todo lo contrario.
El origen de todo nuestro sufrimiento es el amor. Tú eres un ser de amor puro e ilimitado, y esta es la causa de todo lo que te hace sufrir.
Parece una contradicción, ¿verdad? Pero resulta que es así.
La causa profunda del dolor es el amor.
Tu Verdadera Esencia
El fondo de la cuestión es que tú eres un ser de amor totalmente incondicional. Eres 100% amor. Esta es tu verdadera esencia.No eres un 90% de amor, ni un 99%, ni un 99,99% de amor. Eres puro amor al 100%.
Lo que pasa es que, en tu día a día, en función de lo que piensas y lo que haces, solo una parte de este amor sale y se manifiesta.
Cuando tienes pensamientos totalmente positivos y amorosos, toda tu luz sale al exterior y se expresa en toda su magnitud. Este es tu estado natural. Es el estado que resuena con lo que realmente eres.
En cambio, cuando tienes pensamientos negativos hacia algo, una parte de tu luz se bloquea y no sale. Siempre que tienes un pensamiento que no es del todo positivo, una parte de tu amor se queda encerrado y no puede salir.
Te lo puedes imaginar como unas compuertas a través de las cuales pasa un rio de amor. Cuando las compuertas están del todo abiertas, el rio puede fluir con total libertad. Cuando se cierran, el rio se estanca.
Y tus pensamientos son los que abren o cierran las compuertas.
¿Por Qué la Vida Es Tan Dura?
Teniendo todo esto presente, hay dos factores que explican por qué la vida a menudo se complica.El primero es que siempre que nuestro amor se bloquea, nos sentimos mal. Siempre. No hay excepciones en este punto. El amor puro e ilimitado es nuestra verdadera esencia, y siempre que se bloquea sentimos como si nos faltara un trozo de nosotros.
Y el segundo factor es que este malestar se produce siempre al más mínimo bloqueo. Solo que tengamos el más mínimo pensamiento negativo, ya habrá una parte de nuestro amor que se bloqueará y nos sentiremos mal.
Es posible que alguna vez hayas pensado: soy consciente de que aún no me comporto de forma 100% amorosa. A veces critico a los demás, a veces pienso mal de ellos, a veces me critico a mi mismo… Pero tampoco debería pasar nada. Debería haber un poco de margen. Me parece desmesurado que mi vida se tuerza tanto solo por unos cuantos pensamientos negativos de vez en cuando…
Pues no. No hay ni un milímetro de margen.
Y no es desmesurado en absoluto.
Tú eres 100% amor, y siempre que tienes un pensamiento negativo, por pequeño que sea, estás yendo en contra de lo que realmente eres. No puede haber margen en este punto.
Tu alma no aceptará nunca nada que no sea amor incondicional hacia todo y hacia todos.
Cómo Vivir en el Amor y Tener una Vida Fácil y Plena
Siempre que tengas algún pensamiento que no sea del todo amoroso hacia algo o alguien, por muy aparentemente pequeño que sea ese pensamiento, experimentarás algún tipo de dolor o dificultad.Siempre.
Así que si quieres vivir una vida plena y armoniosa, solo hay un camino posible: tener siempre pensamientos amorosos y respetuosos hacia todo.
No puede haber nunca en tu mente un pensamiento de rechazo hacia nada.
Según como se mire, puede parecer un objetivo imposible de alcanzar. Estamos demasiado acostumbrados a pensar negativamente sobre muchas cosas. Incluso hemos llegado a creer que en muchos casos está plenamente justificado hacerlo: tal persona se merece que piensen mal de ella, tal situación se merece ser rechazada…
Y es cierto que hay circunstancias y conductas que debemos mejorar.
Pero no desde el rechazo.
El rechazo no es el verdadero camino de nuestra alma. Nuestro verdadero camino es el amor.
Y siempre hay maneras de enfocarlo todo desde el amor.
Un gran abrazo,
Jan Anguita
https://www.jananguita.es
Comentarios
Publicar un comentario